¿Has escuchado hablar alguna vez del squirting? años atrás mucha gente hubiera dicho que no, pero hoy en día parece que se está poniendo de moda.
El squirting es la palabra inglesa con la que se define eyaculación femenina. Algunas mujeres tienen la facilidad de poder eyacular de una manera parecida a los hombres, expulsando gran cantidad de líquido, cuando se estimula el punto correcto.
Parece que esta particularidad está a la orden del día. Hace algunos años no solía ser algo que atrajera a muchos hombres ni mujeres, o al menos eso parecía, era un tema bastante desconocido y tabú. Pero como con todo, las cosas cambian y la mentalidad de la gente se abre a nuevas experiencias. Aún siguen existiendo muchas conjeturas sobre que es realmente el squirting. Mucha gente más que verlo como una eyaculación femenina, cree que únicamente se trata de pérdidas de orina, tal vez de ahí venga la poca aceptación y los prejuicios al respecto. Hay que dejar claro que este líquido no es orina, ni tampoco es el flujo habitual que tienen las mujeres cuando están excitadas. Con la estimulación del conocido punto G, se puede lograr el squirting. En su ubicación, quedan situadas muy cerca las glándulas uretrales, las responsables de segregar este tipo de fluido.
A pesar de que lo habitual es que estas secreciones pasen desapercibidas durante la relación sexual, lo cierto es que las mujeres que tienen estas glándulas más desarrolladas pueden experimentarlo de forma más evidente, pudiendo llegar a ser “incómodo aunque muy placentero”, aseguran los expertos, si no se tiene la suficiente confianza con la compañera de alcoba.
Las mujeres que tienen facilidad para ello, lo notaran rápidamente al estimularse, las que no la tengan y quieran probarlo, deben ir con cuidado ya que es una zona sensible. Hay que remarcar que según los especialistas, el squirting no hace que el orgasmo sea más placentero, únicamente es una forma más de hacer disfrutar a nuestro cuerpo y vivir nuevas experiencias.
En lo que todos los expertos parecen mostrarse con unidad de criterio es la forma de conseguir un squirting. Según los médicos que han estudiado este fenómeno sexual femenino, la manera de experimentarlo durante el orgasmo se consigue estimulando el punto de Gräfenberg, más conocido como “punto G” pues, cuando la mujer está excitada, las glándulas de Skene se llenan de líquido y, como con el orgasmo, la pelvis se contrae y aprieta los diferentes órganos de la zona, entre los que se encuentran estas glándulas, produciéndose el rebosamiento y posterior salida de la consabida sustancia líquida.