Estimulación de Ambos Clítoris

     La estimulación del clítoris también puede consumarse mutuamente entre las dos amantes. Esta práctica sexual puede resultar muy excitante para ambas, ya que las dos comparten sensaciones en el mismo lugar y al mismo tiempo. Las manos y los clítoris se comunican entre ellos, y antes de iniciar su baile, se hablan de las tristes noches que pasaron a solas, aferrándose a su húmedo recuerdo.

Se cruzaron nuestras vidas y se cruzaron nuestras manos para así llegar hasta la ropa interior de la otra. Prescindimos de las palabras y nos valimos de los gemidos. Juntamos las miradas durante todo el ascenso a la locura. Revolucionamos los sentidos. Desfallecimos de sexo. Desfallecimos de amor.


     Puede experimentarse de diferentes modos: cara a cara es una de las más apetecibles. La visión de las expresiones faciales y de los movimientos corporalesde placer de la pareja sexual puede intensificar la excitación de ambas. Esta postura puede llevarse a cabo estando las dos amantes tumbadas, de pie, de rodillas, sentadas y en cualquier lugar en el que las manos no puedan soportar el permanecer más tiempo separadas de sus amados clítoris. También puede practicarse estando una a espaldas de la otra. Aquella que abraza la espalda de su compañera rodea su cintura con el brazo, estimulándola desde atrás. La otra extiende su brazo hacia atrás, estimulando el clítoris de la amante aunque éste escape a su visión.


Ambas pueden disfrutar de esta práctica tumbándose de lado y de manera inversa, como en la posición del 69. Cada una de las caras y las manos se encuentran de frente con los genitales de la amante. Y da comienzo el cortejo de los clítoris. En estos dulces avatares, el órgano carnal exige un precio por su conquista: la promesa de que éste no sea el último de sus encuentros.



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Fuente: Tu dedo Corazón