Masaje Erótico

   Cuando hablo de un masaje, no se trata del típico masaje rudo que sirve para aliviar un dolor muscular. No te preocupes si nunca has dado uno de estos masajes; te aseguro que tomar la iniciativa para un masaje a tu pareja será una gran forma de reavivar la pasión entre ustedes.


   ¿Qué necesitas para que ese masaje sea inolvidable? Aparte de tus manos, necesitarás un aceite que puedes conseguir en las tiendas de productos de aromaterapia, ya que hay aceites especiales para este tipo de masajes. Los aceites pueden manchar un poco, así que ten a la mano unas toallas y utiliza una sábana cómoda pero que no sea significativo si se llega a estropear. Para crear un ambiente agradable, puedes tener a la mano alguna música romántica y colocar velas o incienso. Procura elegir un momento en el que tendrán total paz y no habrá interrupciones; deberás hacer algunos arreglos para lograrlo, como desconectar teléfonos, etc. Antes de iniciar el masaje, ambos deberán haber tomado un baño, afeitado y cortado y limado sus uñas.

   Tú conoces a tu pareja mejor que nadie, así que de acuerdo a esto, será la forma en que le comuniques sobre el masaje especial que deseas darle. Tú sabrás de qué manera iniciar el encuentro y hacer que tu pareja se sienta cómoda. Con anticipación o en ese momento, habrás acomodado el área con toallas, la sábana, el incienso, el aceite, etc.

   Ahora, ya que tu pareja está receptiva y en posición para un masaje sensual, con tus dedos de la mano da pequeños golpes en su piel. Comienza por la espalda y luego desplázate a los hombros, brazos, glúteos, muslos y pantorrillas. Deben ser golpes rápidos pero suaves. Ya que tu pareja se sienta relajada, puedes continuar con el masaje.

   Coloca una cantidad aproximada de dos cucharadas de aceite en la palma de tu mano y frota tus manos para dispersar y entibiar el aceite. Entonces, comienza a masajear la espalda de tu pareja con caricias largas pero firmes. Al inicio, mantén la comunicación con tu pareja para saber a qué intensidad le agrada el masaje. Nunca sueltes a tu pareja, continúa con el masaje con frotadas rítmicas, variando de masajes cortos a más prolongados y viceversa.

   Aprovecha el peso de tu cuerpo en vez de usar la fuerza de tus brazos, procurando no apoyarte por completo sobre la cama o mesa del masaje. Ya que ambos se hayan sincronizado con la sensación del masaje, comienza a masajear los hombros y brazos y luego desplázate a las piernas y pies. Deberás acariciar los glúteos de tu pareja conforme te vas desplazando para aplicar el masaje.

   Ahora, pide a tu pareja que se coloque boca arriba. Comienza a masajear su pecho, brazos y manos. El masaje a los pechos de tu pareja debe ser gradual, poco a poco. Luego, desplázate a las piernas y pies y finalmente al área de los genitales. Aplica masajes cortos a la zona de las ingles. En esta etapa, tu pareja estará más receptiva y deberás poner atención a cómo se siente y qué es lo que desea que hagas. Llegará el punto en que ambos deseen interrumpir el masaje, pero no lo hagan; continuar con el masaje en los momentos de más excitación les hará experimentar nuevas sensaciones.


Entradas Relacionadas:

♦ Masajes Eróticos en la Cabeza
♦ Masajes en la Espalda: La Zona Más Agradecida
♦ Masaje Erótico en los Senos
♦ Masajes en los Brazos: Grandes Olvidados
♦ Masajes Erótico en las Nalgas
♦ Masaje Perfecto para los Pies
♦ Masaje Erótico en 10 Pasos